2KV Collarada (casi)

Son las 4:15. Este tema suena. ¿Acaso hay canción mas motivante para saludar al nuevo "día"? A las 5 ya salíamos de Zaragoza dirección Villanúa con música motivante en el auto. Conforme nos íbamos acercando a Huesca, el panorama pintaba mas negro. Y no fué hasta coronar el Monrepós cuando dijimos "Pero, ¿dónde está el Pirineo?". Dejamos Jaca y remontamos el valle del Aragón. Las nubes lo cubren todo. Hemos llegado los primeros a Villanúa y, conforme va llegando la gente, nos tememos lo peor. Que nos vamos a volver a casa sin el Collarada en el bolsillo. Pero es lo más sensato. Desde la organización nos comentan que los voluntarios no han podido llegar a cima y que están volviendo a balizar todo, pues la niebla no permite ver mas de 5m. A todo esto, empiezo a saludar a muchas caras conocidas que hace bastante que no veía.

Ultimamos los preparativos: mochila, camel, barritas, geles, cortavientos y bastones. Aunque la carrera se ha acortado, mi estado físico no está para meterse una pechugada asi en el cuerpo. Una vez se da la salida, me quedo en la cola de la carrera. Poco tardo en quedarme solo. A la mínima cuesta, echo a andar. Hemos salido por el camino de la Gruta de Las Güixas, cogiendo un desvío a la derecha por unas escaleras que van a la pista de La Trapa. Por el pinar del Costau de Letranz llegamos a los campos de Moscasecho, donde se encuentra el primer avituallamiento. Seguimos subiendo por el pinar de Paco Cachol que nos lleva a La Trapa. Es en la parte final de este pinar donde nos juntamos tres corredores: Víctor, Javier y yo. Segundo avituallamiento: agua, isostar y un gel. Llegamos a la parte mas complicada de la carrera. El paso de El Achar. Pequeño paso técnico donde hay que echar las manos y que la organización había equipado con cadenas para la seguridad de los corredores.


Ya lleva un buen rato lloviendo con ganas y al llegar de los últimos eso está algo chungo. Una vez superado este paso y siguiendo unas banderas rojas, nos topamos con una manguera de la que no nos separaremos en toda la subida. Víctor y Javier se han escapado, pero aquí me acerco un poco a Javier. Ya van bajando muchos corredores y, el único sincero fué Mario, pues me dijo "Tranquilo que queda mucho". 2h9' después de la salida hago "cima". Toca abrigarse. No se que temperatura habría allí arriba, pero entre la niebla que no se ve mas allá de 5 metros, la lluvia que cae, el aire que hace y que voy empapado tengo la sensación de estar, como mucho a 5º.


Con mucha precaución empiezo la bajada. En nada estamos en el Achar. Ahora si que esta complicado este paso. Está todo embarrado y muy resvaladizo, por lo que hay que extremar la precaución. Una vez superado este paso quedaba toda la bajada por el bosque. Unos 800mD-. Mis cuadriceps me empiezan a decir que ya vale. Así que alterno el correr con el andar. Llego a meta con 3h35' y "escachaú".

La carrera... simplemente me ha encantado. El frío, la niebla, la lluvia... le han dado otro punto mas brutal y extremo. Lo bueno, que habrá que volver para hacer cima.

Desde aquí quiero agradecer a la organización por la carrera tan espectacular que han preparado y que, aunque este año no se pudo completar, seguro que en el futuro podemos llegar y hacer cima. Y también merecen un reconocimiento todos los voluntarios que pese a las inclemencias del tiempo, aguantaron estoicos y todos y cada uno de ellos te recibían con una sonrisa. ¡Gracias!